Sabemos que cualquier actividad de la vida cotidiana puede tener un impacto en el medio ambiente. La Fundación Ecología y Desarrollo (ECODES) promueve desde 2005 el proyecto CeroCO2 para calcular, reducir y compensar la huella de carbono de empresas y particulares. Durante este tiempo, 180 entidades (empresas, instituciones, organizaciones) y decenas de particulares han participado en esta iniciativa, pionera en España.
“Nuestro objetivo es que el mayor número de personas y organizaciones reduzcan su huella de carbono. Para ello calculamos las emisiones de gases de efecto invernadero, como el CO2 u otros, que contribuyen al calentamiento global y al cambio climático. Y después proponemos a los participantes cómo compensar su huella de carbono con su contribución a determinados proyectos medioambientales”, explica Mónica Vidal, técnica del programa.
El proyecto calcula el coste medioambiental de fabricar un producto, organizar un evento o hacer un viaje. Por ejemplo, un vuelo Madrid-Bangkok, ida y vuelta para una persona supone una huella de 3,5 toneladas de CO2, según la calculadora del proyecto CeroCO2. Los viajes en avión, por su gran uso de combustible, tienen una huella de carbono elevada. ECODES propone compensar esta emisión con la colaboración en un proyecto medioambiental, como, por ejemplo, uno de generación de energía eólica en la India. En este caso, el precio por tonelada de CO2 es de 7 euros. Así que una contribución de 24,5 euros a este proyecto compensaría el impacto medioambiental del vuelo Madrid-Bangkok.
El proyecto CeroCO2 se dirige al llamado ‘sector difuso’ (sector agrario, residencial, transporte), responsable del 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero en España. Algunas entidades que han participado son: DKV Seguros, las estaciones de servicio Zoilo Ríos, el Colectivo de Educación Ambiental, el Servicio de Actividades Deportivas de la Universidad de Zaragoza, el Centro de Buceo Santa Pola (Alicante), Bancopopular-e.com, la empresa de alquiler de coches Respiro Madrid…
En cuanto a DKV se ha convertido en la primera aseguradora en Europa que calcula y verifica el coste medioambiental “la huella de carbono” de una póliza de seguros. Conforme a PAS 2050:2011, un producto cuya huella de carbono resulta especialmente difícil de cuantificar. Lo hizo para su póliza DKV integral classic individual, y ha verificado el estudio por una entidad de certificación líder a nivel mundial DNV Business Assurance.
Así, DKV Seguros aborda el cálculo de la huella de carbono de un servicio mirando desde el punto de perspectiva del análisis de ciclo de vida. Hasta ahora el cálculo se enfocaba de manera incipiente en productos, y los datos recopilados por años han supuesto el paso previo para poder disponer de datos fiables para calcular la huella de carbono de una un artículo como una póliza. La manera en que han obtenido la información de las emisiones generadas permite conocer el verdadero impacto generado por la puesta en el mercado de un producto/servicio llevando en cuenta toda la cadena de valor.
En conclusión el resultado ha arrojado que la póliza integral classic individual tiene una huella de carbono de 20,4 Kilos de CO2e. Esta huella incluye las emisiones derivadas de las oficinas comerciales y de gestión de DKV en toda España, el material comercial necesario: folletos, libros del cuadro médico, tarjeta sanitaria, viajes de empleados, consumo de energía, valija interna y reciclado de materiales entre muchas otras fuentes de emisión.