Tanto para la compañía aseguradora Mapfre, corren muy malos tiempos, debido al descenso en beneficios que sufrieron durante el ejercicio anterior, pero eso no es lo peor de todo, ya que sus problemas siguen e incluso han aumentado debido a un comportamiento negativo del mercado asegurador nacional, que viene sufriendo subidas y bajadas drásticas y continuas en la deuda soberana; repercusiones sobre sus balances y las estrategias de reestructuración de las cajas de ahorros, con las cuales hubo negocios en conjunto y se compartió el capital.
Unido todo a que aún se albergan dudas sobre la nueva norma que próximamente se tendrá que aplicar: Solvencia II, sobre el sistema de estimación de riesgos y los cálculos de requisitos de capital en los seguros.
La aseguradora Mapfre, ha visto reducido los beneficios en un 31%, en comparación con ele ejercicio anterior. El descenso se ha debido a la concesión de 404,8 millones a “provisiones y deterioros” (por inversiones en Bankia, Cattolica y en otros activos inmobiliarios y financieros) y se expone que los beneficios en 2012 creció un 9,6% y sus ingresos en un 7,5%. Desde la compañía indican que el negocio exterior ya es su máximo negocio aportando el 60% de las primas y de los beneficios que durante el último año fue de 750 millones de euros.
Por otra parte, la división de seguro en España, se establece en el 33% de las primas, que llego a los 7.508 millones, reduciendo un 4,5%.
Las soluciones que manejan las aseguradoras son medidas de ahorro excepcionales y otros sistemas de gestión de todo el grupo. Confían en que al finalizar 2013, repetir los mismos beneficios, o incluso poder superarlos en cierta medida, aunque esto será por todos los gastos que puedan ahorrar y no, porque el mercado vaya a mejorar.